Para la gran mayoría de las personas, un préstamo de capital privado puede ser un tema totalmente desconocido. A pesar de esto, es una alternativa de confianza frente a los préstamos que otorgan los bancos. Este producto financiero tiene grandes ventajas para particulares, empresas o autónomos que necesitan ayuda para sacar adelante un emprendimiento o contar con un capital extra. Además, acceder a este tipo de préstamos puede determinar el éxito de un proyecto personal o empresarial. Con este propósito, la empresa de servicios financieros Inmofinan ofrece este tipo de financiamiento, además de asesoría especializada para solicitarlo ante un particular.
Un producto financiero al alcance de todos
Un préstamo de capital privado es un financiamiento otorgado por entidades o individuos que no pertenecen a los bancos. Se trata de una opción financiera para aquellos que no pueden acceder a un préstamo a través de canales convencionales. Por ejemplo, Inmofinan actúa como una entidad que proporciona este tipo de préstamos, en unas ocasiones directamente y en otras buscando financiación y ofreciendo soluciones ajustadas a las necesidades de cada cliente.
En este orden de ideas, obtener una financiación a través de inversores privados puede ser más fácil que si se acude a una financiación bancaria, ya que estas entidades son mucho más exigentes en cuanto a ratio y facilidades de registros de morosidad y plazo en años, entre otros requisitos.
Asimismo, especialistas en el tema señalan que comparar los préstamos de capital privado con los préstamos bancarios es como elegir entre un traje a la medida y uno de confección estándar. Mientras que el préstamo bancario se rige por estrictos protocolos y parámetros, este financiamiento ofrece una solución más personalizada a las necesidades financieras individuales.
Usos, ventajas y requisitos para solicitar un préstamo de capital privado
El préstamo de capital privado es un producto financiero que sirve para un amplio abanico de propósitos, entre los que se encuentran el inicio de proyectos empresariales, inversiones inmobiliarias, consolidación de deudas, o para cubrir gastos imprevistos.
Este tipo de préstamo tiene una serie de ventajas entre las que destaca la rapidez en la concesión de fondos, algo que es vital para quienes buscan respuesta inmediata ante una necesidad de liquidez. Además, tienen menos requerimientos en cuanto a documentación y solvencia. También son más accesibles para personas con historiales crediticios no ideales, donde otras puertas financieras se cierran.
Para solicitar este producto siendo particular solo se debe presentar DNI, contrato de trabajo, las 3 últimas nóminas, declaración de la renta o certificado de retenciones, los 3 últimos recibos de los préstamos a reunificar. Por otra parte, los autónomos deben presentar DNI, Modelo 100, recibos de los 3 últimos trimestres y los 3 últimos recibos de autónomos. En cambio, las empresas deben presentar balance anual y escritura de sociedad.
Por último, los pensionistas que necesiten solicitar un préstamo de capital privado solo deben presentar DNI y certificado de la pensión anual.